Botas altas, altísimas, como las vistas en el desfile de Fendi. O bien más bajas pero rigurosamente de punta o super cuadradas. Los zapatos solo con el calcetín a la vista, quizás del color del invierno, el rojo. Focus sobre los tacones, que son de aguja, geométricos, o elaborados como esculturas. Atreveos también con las zapatillas de pelo. Saint Laurent, Cèline, Prada.